La llamada de la biodiversidad en Escandinavia
Nos tenemos que ir muy lejos para contar una buena historia. Desde la Escandinavia del Medievo, el ser humano acostumbraba a tener una relación muy íntima y estrecha con la naturaleza.
Dio como resultado el desarrollo de una nueva forma de comunicación que entró en simbiosis completa entre el mundo vegetal, como animal y el ser humano de aquellas zonas especialmente duras de vivir.
Se le llamó el kulning, y se acostumbraba a emplear primordialmente para atraer y llamar a animales y criaturas que se encontraban a largas distancias; animales de pastoreo, como las vacas y cabras.
Inclusive, se afirma, que dicha llamada asustaba a esas fieras feroces, como el bolo, que atacaban a los animales del pastor. Estos cantos acostumbraban a ser cantados por las mujeres, quienes se ocupaban del pastoreo en las montañas y en las tierras más cercanas a los poblados.
Se comenta que los cantos kulnings se solían hacer a lo largo del valle, resonando y retumbando en las paredes escarpadas de las montañosas de los bosques y animando a que numerosos animales, según fuera el tono del canto del kulning, regresaran a la granja en un periodo corto de tiempo.
La artista, fotografa y blogguera Jonna Jinton, decidió reanudar la belleza de los cánticos tradicionales con su voz cristalina y demostrar al mundo entero que la llamada a la naturaleza es posible, que existe realmente un simbiosis y equilibrio entre la naturaleza y los ecosistema terrestres, y el ser humano.
Si queréis conocer más sobre la artista este es un pequeño documental…
La diversidad biológica en Escandinavia es un tesoro… ¡Incluye multitud de animales y vegetales! La fauna escandinava es notable por su adaptabilidad a condiciones extremas. Animales como el reno, el lince euroasiático o el glotón habitan en estas tierras frías.
Escandinavia es hogar de varias especies emblemáticas que juegan un papel crucial en sus ecosistemas:
- Lobo gris: Este depredador es vital para mantener el equilibrio de las poblaciones de herbívoros.
- Alce: El más grande de los ciervos, importante tanto ecológica como culturalmente.
- Águila real: Un símbolo de poder y majestad, esencial para controlar las poblaciones de pequeños mamíferos.
Los bosques boreales abarcan gran parte de la región, hogar de una gran variedad de árboles, como coníferas (pinos, abetos) y caducifolias (abedules, álamos). Proporcionan un hábitat esencial para numerosas especies animales; alces, osos pardos, linces y aves rapaces.
Las montañas, que se elevan en Noruega y Suecia, albergan glaciares, fiordos y cascadas. Estos paisajes de gran altitud son el hogar de especies únicas; renos, cabras montesas y aves árticas.
Los lagos y ríos de Escandinavia son un refugio para peces; truchas, salmones y percas. Estos ecosistemas de agua dulce también son importantes para las aves acuáticas, como patos, gansos y cisnes.
Las costas de Escandinavia, bañadas por el Mar del Norte y el Mar Báltico, albergan ballenas, delfines, focas y aves marinas que en muchos casos están al borde la extención.
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